La investigación del crimen de la calle Chacabuco 59 avanza lentamente y pareciera ser que cada vez hay más dudas que certezas. Mientras tanto, los cinco principales sospechosos del homicidio de Laura Gabriela Picciuto continuarán bajo la lupa y cuatro de ellos permanecerán privados de la libertad por al menos 40 días más.
El 12 de mayo un albañil encontró el cuerpo de una mujer dentro de una cisterna vacía ubicada en la vivienda de Chacabuco 59. A pesar de que todos los indicios apuntaban a que “Gaby” era la mujer asesinada, debido al avanzado estado de descomposición del cadáver, luego de dos semanas se confirmó la identidad de la víctima y que fue ultimada de un golpe en la cabeza. Desde el hallazgo del cuerpo, hace exactamente tres meses, la Fiscalía de Homicidios II, a cargo de Carlos Sale, manejó varias líneas investigativas y dejó tras las rejas a cinco personas. Ayer, el auxiliar fiscal Miguel Fernández solicitó que todos los imputados continúen en la misma situación procesal durante 60 días más.
Sofía Di Gianni fue la primera en ser aprehendida luego de que en un allanamiento le encontraran el DNI y una tarjeta de débito de “Gaby”. Después de casi dos meses en prisión, el 7 de julio quedó en libertad mientras cumple medidas de menor intensidad. Ayer, el representante del MPF, solicitó que Di Gianni siga cumpliendo las mismas medidas durante. “Siendo que gran cantidad de la evidencia que la vinculaba ya ha sido analizada, y al no poderla desvincular todavía del legajo considero que la forma de mantenerla vinculada es con la medida que viene cumpliendo”, explicó. La defensora Florencia Ciotola no se opuso al pedido.
En cuanto al resto de los imputados, Fernández fundamentó el pedido de prórroga aludiendo al riesgo de entorpecimiento la investigación. “Falta determinar si existe o no un acuerdo entre los que estuvieron residiendo el inmueble donde se produjo el hecho”. También adelantó que restan realizar las pericias de dos celulares y una prueba de ADN en la que habría que comparar 16 elementos con muestras genéticas de los imputados.
Daniela Escalante, la abogada defensora de José Luis Fumero, ex esposo de la víctima y que quedó involucrado por haber vendido la propiedad sin el consentimiento de Picciuto, no se opuso a que su pupilo continuara bajo prisión preventiva, pero solicitó que sea por 40 días ya que 60 le parecía excesivo.
Lo mismo sucedió con Luciana Filmann, la representante de Facundo Leonardo Salomón, la última pareja que tuvo “Gaby” y que estuvo prófugo en Córdoba.
Quienes no estuvieron de acuerdo fueron José María Molina y Juan Pablo Bello, los defensores de Alfredo Socci y Natalia Liberman, que se encuentran bajo arresto domiciliario. Los abogados solicitaron la libertad de sus clientes y sostuvieron que desde el primer momento ambos se pusieron a disposición de la justicia y que no había ninguna prueba en su contra. Además dijeron que no les parecía correcto que deba recaer sobre sus espaldas las demoras de las investigaciones que pertenecen al MPF.
Finalmente, el juez Lucas Alfredo Taboada, hizo parcialmente lugar al requerimiento de Fernández. Aceptó todas las medidas propuestas pero las dispuso por el plazo de 40 días.
Antes de dar su resolución, el vocal mencionó a Walter Marchese y Luciana Marín, el comprador de la propiedad y la procuradora que realizó las gestiones para que Fumero concrete la venta. “En todas las audiencias los nombran. Sé que no puedo tener injerencia en la investigación, pero me llama la atención que si hay una foto de uno de ellos en el inmueble a otros imputados les cuestionen presuntamente que entraron a donde vivía la víctima aunque no haya certezas; es algo que genera un marco de duda”. (Producción periodística: Micaela Pinna Otero)